viernes, 9 de marzo de 2012

La melancolía.
No debe ser necesariamente una cosa mala.
A mi me acompaña en mi camino, es una sensación montada en mi lomo mirando de soslayo hacia atrás, a los recuerdos. A veces me arranca lágrimas, no siempre son de dolor. La melancolía es una extraña dulzura de ayer...
La melancolía me ayuda a valorar el hoy puesto que me ha costado mucho llegar aqui y me hace valorar y entender todo lo que gané y todo lo que perdí... todo lo que me dieron mis raíces y todo lo que me robaron. Es una sensación tan inmensa que sencillamente es indescriptible pero al final me conduce indefectiblemente a la gratitud.
LA MELANCOLÍA ES LA FELICIDAD DE ESTAR TRISTE (VICTOR HUGO)